CAPITULO 4. Un Chueca en Huelva York

De verdad, voy a pensar que mi edificio se esta convirtiendo en un pequeño Chueca en esta little Manhattan.

Al llegar esta tarde a mi apartamento y mientras esperaba el ascensor, Rosie, una vecina que vive casas mas arriba, venia a cobrarle el alquiler a los inquilinos de la puerta 3.
A mi edificio está llegando mucha gente nueva, estudiantes que preparan el nuevo curso en la Huelva York University Collage que esta a pocas manzanas.
Rosie llama al timbre y abre Daniel, un chico de poco mas de 20 años, era moreno, y la verdad que no tenia ningún gusto a la hora de vestir, pero eso si, era monísimo.
Daniel estaba un poco incomodo al ver mi mirada fijada en sus horteras gafas y ante la mirada atenta de su casera, pero chic@s, estoy convencido que nos volveremos a ver, no nos queda más remedio, Daniel era gay, vamos a pesar de se un hortera de bolera era gay, no os penséis que el ser gay siempre va unido al buen gusto.

Hoy he salido a pasear con mi Dior® en una mano y mis Giani Versace® en otra, Ay! ahora que la nombro... hoy han venido a hacerle la manicura a mi coneja Christina Dior ...(será lo más cerca que este de un conejo) sobre las dos de la tarde ha aparecido en mi apartamento una chica monísima con unos utensilios un tanto extraños.

-¿Y todo eso sirve?
- Si querido, Dior no es una coneja cualquiera, tenemos que cuidarla a la perfección y todos estos aparatos tienen su función

Con razón es tan caro, tienen que amortizar la compra de esos utensilios, pensé yo.

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El mantenimiento de las uñas de Dior duró un santiamén y como mi coneja es tan divina como su dueño ni se inmuto, ella siempre manteniendo la compostura.

Wala Bradshaw quería que nos viéramos. Hoy salía antes de la redacción y pasaba a por nosotros, Sary York aun dolorida por la noche de ayer se puso mona, cogió sus PRADA® se colocó unos Manolo y ahí que nos fuimos a comernos las calles onuyorkinas.

Primero un delicioso café en el Starbucks, teníamos que ver a ese maravilloso camarero que tan bien hace los Frapuccinos, después nos fuimos a una cafetería situada en Paul Rada Avenue (aunque no se lo crean de él salió el nombre de la firma PRADA) a ver pasar a los chicos monos desde nuestro palco oficial con insonorización incluida para así poder hacer comentarios.

J.Jones: Dios, le has visto el culo a ese?
W.Bradshaw: me pasaría el día dibujando con el.
S.York: Chicas, los fantasmas...

Sary estaba en su mundo, la verdad que está un poco salida, pero ya sabéis que ella en publico nunca lo admitirá.
Un Cosmopolitan, dos...

W.Bradshaw: Chicas, ya no puedo más, además está a punto de empezar mi programa favorito en televisión.
J.Jones: Si, hoy también echan esa maravillosa serie donde Álvaro ya no se llama Álvaro pero esta tan...

En ese momento interrumpe un Abdalá vendiendo CD´S piratas.

J.Jones: Lo sentimos cari, nosotros no consumimos piratería.

Un día tranquilo a excepción del vecino gay que me he encontrado a ultima hora, pero aun queda mucha noche y como ya sabes soy fan acérrimo de Internet y el cibersexo...

Se os quiere...


Jorge Jones.

PS: Por cierto el hijo de Rosie esta muy, muy bueno.